Concepto de la muerte de un masón: Oriente Eterno

Teoría de la reencarnación; transmigración del alma de un cuerpo muerto a otro que nace; el vocablo, de origen griego: μετεμψύχωσις, compuesto de μετα- («más allá»), Éν- («en, dentro»; la n cambia a m antes de p por eufonía); Ψυχη («alma») y -ωσις (-osis = «proceso») … sugiere que esa reencarnación sea demorada, precisamente, «tardía».

La MASONERÍA, como entidad espiritualista, no se preocupa por la existencia o no de la transmigración de las almas.
Sin embargo, admite la existencia del Oriente Eterno, a donde Van los MASÓNES muertos, con la finalidad de reunirse en Tiendas idénticas a las de la Tierra.

El gran número de MASONES fallecidos forman una grey denominada Fraternidad Universal Blanca; (la ley palingnésica: “La vida se sostiene por la muerte” y nosotros representamos dramas astronómico de Hiram, la metempsicosis).

Porque la MASONERÍA no es una religión, esa Fraternidad no sería una Corte Celestial y no habría una dirección divina, sino simplemente una influencia «mental» considerando que la Mente Nunca Muere.

En la formación de la Cadena de Unión, se cree, participan miembros de la Fraternidad Universal Blanca, listos para aluden en beneficio de los necesitados.

Se trata de uno de los insondables misterios de la MASONERÍA.

El MASÓN jamás debe considerarse sólo en el mundo, abandonado a su propia suerte, pues, como saben los maestros del Tercer Grado, cuando se hace el Signo de Socorro, son invocados justamente esos «Hijos de la Viuda», que sin duda socorren el » sea ​​necesario.

Fuente: Breviario Masónico / Y en el caso de las mujeres, Madrás 2014 p. 248